Wacker Innsbruck 2013-14

La temporada pasada no tuvo emoción en la lucha por el título, pero el descenso suplió esa carencia. Que se lo pregunten a los del Tirol, estaban virtualmente descendidos, perdían 2-0 contra un Wolfsberger AC que se jugaba una plaza en la Europa League y marcaron tres goles en unos minutos para salvar la categoría en el año del centenario. Una mala confección de la plantilla y los problemas económicos les llevaron hasta esa situación límite.

Ahora, tras celebrar los 100 años de existencia y aliviado por una nueva oportunidad, el técnico salvador, Roland Kirchler, ha intentado conformar una plantilla más eficiente por menos dinero. Entre los nuevos destaca el central vasco, Egoitz Jaio, ex del Numancia, que viene a aportar seriedad en una línea muy floja la pasada campaña. En el eje de la defensa debería acompañarle otro novato, Stipe Vucur, llegado desde la Erste Liga. También desde la segunda ha llegado otro jugador, ya veterano, con pinta de jugar muchos minutos, Miroslav Milosevic, al que una lesión tendrá le obligará a parar unas semanas. Por último, ha llegado Stjepan Vuleta desde el Basilea, que será un añadido importante a la profundidad de banquillo en la delantera.

La renovación de los tiroleses no pasará por la portería, donde el veterano, Szabolcs Sáfár sigue dando un buen rendimiento pese a que, estéticamente, es poco ortodoxo. En la defensa, hay que destacar a un buen proyecto de lateral izquierdo, Christian Schilling, quien podría estar pronto en uno de los grandes de la liga. El mediocampo parece estar en una fase de transformación y los clásicos, Tomas Abraham y Christoph Saurer, ya no tienen un sitio garantizado. Tampoco sigue en la plantilla, el español Carlos Merino. El ataque tiene un dueño y señor, Roman Wallner, que llegó al rescate y, aunque no aportó gran cantidad de goles, sumó en todas las facetas para ayudar a la salvación. Junto a él, Christoph Wernitznig tiene una ocasión para recuperar su mejor versión, y olvidar la irregular temporada 12-13 aunque su mejoría en el tramo final fue destacable. En el mismo caso, el emergente Lukas Hinterseer acabó la liga a tope y forma parte de los indiscutibles para Kirchler.

Será otro año difícil para el Wacker Innsbruck pero, por fin, parece que las cosas se están haciendo con cierto sentido. Si la economía del club responde, no deberían pasar apuros para mantener la categoría, aunque cualquier otro objetivo se antoja utópico.